Vaya escandalo cibernético desato Edward Snowden, ex subcontratista de la agencia nacional de seguridad estadounidense (NSA).
Este joven filtró el detalle de PRISM, que es un conjunto de programas para espionaje que Washington lleva a cabo en Internet y a empresas de telecomunicación de manera masiva.
Tras filtrar la información al Washington Post de Estados Unidos y al Guardián de Inglaterra con las pruebas de lo que hace Estados Unidos quedo evidenciado que las compañías Verizon, Apple, Microsoft, Google, America On Line y Yahoo, participan activamente proporcionando todo lo que hacen sus usuarios en internet, conversaciones telefónicas, correos electrónicos, archivos enviados, fotografías, videos, en concreto todo lo que hacen los usuarios.
Los norteamericanos con justa razón están indignados porque los correos de Hotmail, Gmail, Yahoo y demás compañías de internet entregan al gobierno de Estados Unidos y plan de vigilancia cibernética:
- Acceso completo y directo a los registros telefónicos de los clientes de Verizon y por supuesto que podrían tener los de AT&T, TMobile y porque no Telmex.
- Registros de chat y post además del detalle de datos en medios sociales.
- Datos almacenados en discos virtuales y correo electrónico.
- Tráfico de voz y transferencia de archivos.
- Comunicaciones en tiempo real (en vivo).
En resumen FBI, CIA, NSA tienen todo el detalle de todo lo que se mueva a través de las principales compañías de internet y telecomunicaciones.
Lo más curioso es que apenas unos días antes, Estados Unidos se quejó públicamente de ser víctima del ciberespionaje de China y el robo de información confidencial del sistema de defensa con datos de sus acorazados, misiles, satélites y otras armas; pero ahora ya se sabe que Estados Unidos literalmente es HIPER espía o Big Brother, así que ya lo saben amigos: ¡UN MUNDO NOS VIGILA! diría Pedro Ferriz.
Por cierto hoy el Presidente de Estados Unidos Barack Obama y el Presidente de China Xi Jingpin están reunidos y por supuesto que se darán un agarrón privado por cuentas pendientes de espionaje y ataques deliberados por internet.
Fernando Thompson 
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